De aquí en adelante reconoceré que todos los días la vida me pone a prueba en igual forma. Si persisto, si sigo probando, si continúo, alcanzaré el éxito. Soy un león y me niego a hablar, a caminar o a dormir con las ovejas. Me abstendré de escuchar a aquellos que lloran y se quejan de lo amarga que es la vida para ellos, porque la enfermedad es contagiosa. No me corresponde a mí saber cuantos pasos son necesarios a fin de alcanzar mi meta, persistiré.. Nunca sabemos cuan cerca del éxito estamos.
Los pequeños intentos, esos intentos únicos, repetidos pero únicos, completarán cualquier empresa. Borraré de mi vocabulario palabras como abandono, no puedo, imposible, irrealizable, fracaso,miedo, sin esperanzas y retirada. Si me ataca la desesperación, seguiré trabando en medio de ella. Trabajaré y aguantaré. Pasaré por altos los obstáculos y mantendré mis ojos fijos en las metas por encima de mi cabeza. Cuantas mas veces fracase en una meta, más aumentarán las posibilidades de éxito. Una mirada de desaprobación me indicará que después vendrá una sonrisa, seguiré busandola. Debo fracasar con frecuencia para tener éxito una sola vez. Cuando haya terminado el día, sin tener en cuenta si ha sido un éxito o fracaso, procuraré realizar una esfuerzo más. Trataré de cerrar el día con una victoria, y si ese intento fracasa, haré otro. No permitiré de ninguna manera que ningún día termine en fracaso. Me olvidaré de los acontecimientos del día que ha pasado, ya fuesen buenos o malos y saludaré el nuevo día con confianza de que éste será el mejor día de mi vida. Persistir, es el secreto para alcanzar la victoria.
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